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Sabritas Todo Comenzó Con Una Vieja Bicicleta

Comenzó vendiendo habas y garbanzos en una bicicleta vieja como vendedor ambulante a lograr ser millonario gracias a su entusiasmo

Esa es la inspiradora historia de Papas Sabritas…

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Una historia que proviene de uno de los más humildes hogares de México, una historia que debes de conocer y te dejará sin aliento.

¿Te recuerda algo la siguiente frase? “A que no puedes comer solo una”.

 

Esa marca entrañable que te acompañó desde tu infancia con los tazos y que, a día de hoy te deleita con su inconfundible sabor tiene una historia de éxito que es meritoria de contar. Quédate conmigo que acá te la cuento.

 

Permanece atento que aquí te mostraré una de las historias más interesantes de la industria de las botanas.

 

 

La historia de Sabritas inicia en Ciudad de México en 1943, con un hombre de escasos recursos que decide empezar con un emprendimiento en el que se basaba en crear botanas con garbanzos y habas en su propia casa. Y salía a repartir y vender como ambulante en su bicicleta.

Era el México de los años 40´s.

Muchos vendedores trabajan de esa manera, entre ellos panaderos, repartidores de comestibles, afiladores, y un sinfín de vendedores ambulantes en bicicleta circulaban de esta manera por las calles de la ciudad de México.

 

Ese fue el primer negocio que tuvo Don Pedro, y que tuvo por nombre “golosinas y productos selectos”, siendo el inicio de algo sumamente grande.

 

El nombre del genio detrás de Sabritas fue el del señor Pedro Marcos Noriega, que tras las ganancias que le dejó su negocio, decidió comprarse una pequeña freidora y en ella, crear su próxima obra maestra unas pequeñas chips hechas a base de Maíz y Papa.  De origines humildes, un auténtico hombre trabajador y emprendedor, sobre todo se habla mucho de su matrimonio, tuvo la fortuna de que su esposa siempre le apoyase en su emprendimiento, el liderazgo de Don Pedro Marcos Noriega siempre fue notable.

 

Este invento que revolucionó la forma de comer botanas en México tuvo por nombre inicial “Sabrosas Botanitas” que, gracias a ese nombre tan largo, y con el tiempo decide acortárselo colocándole el nombre a las famosas “Sabritas”.

 

 

Este hombre comenzaría no solamente con el servicio de producción, sino también contaba con la distribución del mismo, contando con una vieja bicicleta de su propiedad como su único el medio de transporte.

 

¿Te imaginas que una de las marcas más reconocidas en México y el mundo haya comenzado su repartición de esta manera en una vieja bicicleta?

La próxima vez que te hagas menos a tu y a tu negocio recuerda esta fantástica historia de Sabritas.

 

En aquella bicicleta vieja, Noriega lograba llegar con sus botanas a lugares populares de la capital de México, surtia a tiendas de vallejo, la morelos, la colonia centro entre las mas populares. donde sin dudarlo, fue muy bien recibida además de ir adquiriendo con el tiempo cierta fama y prestigio.

 

Al cabo de 23 años de arduo trabajo por parte del señor Noriega, en el año 1966, Pepsi-Co pone sus ojos en el pequeño negocio teniendo en cuenta el potencial que tenían, ya había adquirido un año antes la primera empresa de frituras como lo era Frito-Lay.

 

historia de Frito-Lay, que puedes ver en los videos de nuestro canal y que cuenta como en EEUU, un par de emprendedores vendían botanas por seprado uno de forma ambulante en su auto y otro en una confitería, que se desarrollaba casi al mismo tiempo que Sabritas en México, y que al final se cruzarían en el camino, tomando un rumbo similar y que terminarían por fusionarse tiempo después.

 

Sin embargo, nada podía equiparar ese sabor de “hecho en casa” con el que si contaban las Sabritas.

Es por eso, que la marca estadounidense PepsiCo decide ofertar por la receta de las papitas y fusionarla para que fuese el producto estrella de Frito-Lay.

 

Tal vez Noriega no debió aceptar esa oferta, ya que él tenía todas las de disparar como cohete a su querida Sabritas, pero dimitió a su sueño y aceptó con una única condición, esta condición consistiría en que lo dejasen trabajar en la elaboración de las frituras para así, darle ese sello de calidad que solo su creador Marcos Noriega podría otorgarle.

 

Dos años después, la marca abriría su primera fábrica en la colonia de Vallejo en Ciudad de México, misma colonia en la que el propio fundador siendo mas joven repartia sus papas Sabritas en su bicicleta vieja, empezando así las aperturas de diversas fábricas a todo lo ancho de la república mexicana.

 

Lugares como Guadalajara; la tercera fabrica en Saltillo; posteriormente, las localidades de Ciudad Obregón y Mexicali fueron sedes de exitosas fábricas que engrandecieron la marca.

 

Tras casi 20 años de haber estado en el mercado, Sabritas, ya lograba posicionarse como la marca mexicana más conocida internacionalmente después de cervezas Corona, donde a principios de la década de los 80’s lanzaría su primer eslogan que representaría a la marca, rezando lo siguiente: “Sabritas, A que no puedes comer solo una”.

 

Tiempo después, Pedro Marcos Noriega analizaba cuál iba a ser el logo de su exitoso negocio, por lo que decidió realizar un estudio de mercado con acérrimos consumidores de la marca. Para ello, preguntaron a esas personas qué sensación les provocaba al momento de comer papitas de Sabritas, a lo que la mayoría respondió que le provocaba una inmensa ‘felicidad’.

Por lo anterior, se pidió el apoyo de Walter Landor, famoso por otros logos como Levi’s, FedEx o AliItalia, esto con el fin de crear el logotipo de la marca, el cual estaría basado en una carita feliz. De esta manera, se consolidaría la imagen que hasta ahora se conoce en los empaques de Sabritas.

 

Casi 3 décadas más tarde, en 2011, el equipo de mercadotecnia lanzó una campaña publicitaria para generar sonrisas en la gente, denominada “Sabritas, te quiere ver sonreír”.

 

Parte de la estrategia consistió en lanzar productos de la empresa desde 70 metros de altura con la ayuda de un globo aerostático. De esta forma, más de 200 mil bolsas de papas fritas cayeron desde el cielo de una manera suave.

 

Finalmente, Tras la muerte de Don Pedro en 1963, su hijo Guillermo toma las riendas de la empresa y del convenio con PepsiCo. Tanto dinero dejó esa alianza, que en 1982 decidieron abrir una tienda de confitería para vender únicamente los productos originales de la antigua “golosinas y productos selectos”, además de otro tipo de caramelos.

 

Fue así que nació una nueva división de productos que llevaría por nombre Sonric’s y que sirvió como colchón económico al momento de una contracción económica que afectaría a Sabritas años más adelante.

 

Se dice como leyenda urbana que Sonric’s es la abreviatura de ‘son ricos dulces’. En la actualidad, la marca es conocida por su mascota llamada El Maguito Sonric’s que ha representado la marca desde su adhesión.

Luego de esto, el éxito de la marca fue tal que decidieron expandir aún más su mercado emprendiendo en el nicho de alimentos comestibles del estilo de las mezclas de polvo seco y agua de sabor bajo el nombre de Alegro Internacional.

 

Podría decirse que Sabritas es la versión mexicana de las botanas Lay’s, quien bajo ese nombre ha logrado magnitud importante mundialmente siendo el patrocinador de uno de los eventos más importantes del mundo como lo es el mismísimo mundial de futbol.

 

 

Esto ha llevado a que, en varios países del mundo, el nombre puede variar teniendo en cuenta las diferentes historias que tiene la marca y sus versiones más autóctonas.

Déjanos en los comentarios de que país nos ves y si en tu país se venden las papas Sabritas

 

Por ejemplo, en los países latinoamericanos como en Argentina, estaban las papas Frenchitas antes de llamarse Lay’s; Evercrisp en Chile; en Brasil la marca Elma Chips; en Colombia están las papas Margarita y en Venezuela se encontraban las papas Lo Nuestro que con los años pasó a ser Lay’s Stax, una versión más parecida a las Pringles.

 

La repercusión de la marca perteneciente a Frito-Lay tiene una gran influencia dentro de México, pues este mantiene acaparado el 80% del mercado de las botanas en la región, donde su competidor más cercano es la marca “Barcel” del grupo Bimbo que solamente tiene el 12%. El resto del mercado se basa en producciones locales con un poder de distribución mucho menor a lo que representan esos gigantes que recuerda ciertamente a lo que fue Sabritas en sus orígenes.

Cosechan sus propias papas en tierras mexicanas empleando una cadena de suministros y logística enormes, pasan cosechar el producto a procesarlo directamente a la fabricas productoras de sabritas.

 

Ya con el nombre Lay’s a nivel mundial pasa una situación similar, donde la marca de Frito-Lay se posiciona con creces acaparando el 70% del mercado y de la influencia global, superando a sus más grandes competidores como Pringles, CapeCod, Bitz, Pap’s, etc.

 

Ninguna marca de frituras puede decir que ha logrado conseguir ser patrocinador de las copas del mundo, de la Champions, del Super Bowl en la NFL y de múltiples equipos en la MLB. Ya que figuras deportivas como Messi, De Gea, Pogba, Lieke Martens, LeBron James, Tom Brady y Rob Gronkowski han aparecido en comerciales de Sabritas.

 

¿Quién diría que todo esto pasaría solamente por atreverse a emprender? La historia de un señor de origen humilde, y que distribuía sus botanas en una bicicleta vieja, a convertirse en un empresario exitoso con una marca que representa no solo a México, sino a toda Latinoamérica. Una historia de éxito que comenzó soñando despierto.

 

En la actualidad ¿Quién no conoce a Sabritas? Esto es difícil de responder, ya que hoy por hoy es una marca mexicana que se convirtió en la versión latinoamericana de las papitas Lay’s estadounidenses.

 

Posiblemente, podrías imaginar que la marca comenzó en una oficina súper acaudalada y que fue una decisión para pegar con todo en el mercado latino, pero la verdad es que fue todo lo contrario.

 

¿Qué pasaría si te dijera que Sabritas nació de un emprendimiento cualquiera? Así es, un pequeño negocio como la venta de helados o pan que pudiese tener cualquier vecina en un vecindario de nuestros países.

 

Sabritas tiene unos orígenes humildes pero su producto fue tan bueno que evolucionó hasta convertirse en el monstruo de las frituras que conocemos a día de hoy.

Desde preparar un producto casero para salir a venderlo en las calles como ambulante a formar un imperio millonario con millones de ventas cada dia. Ese fue el mensaje que nos deja esta maravillosa historia.

 

Gracias por acompañarnos en esta maravillosa historia de emprendimiento muestra de cómo no hay momento de fecha para emprender, una historia que nos recuerda que el mejor momento para emprender es hoy.


VIDEO COMPLETO SOBRE LA HISTORIA DE SABRITAS